Los Santos Mártires, San Fabián y San Sebastián recibieron la visita de los cacereños en una mañana fría pero soleada.
La venta de roscas, los productos típicos donados por la feligresía para la subasta en la mesa de ofrendas, los pinchos de tortilla y patatera, hacen que se generen unos ingresos que después se destinan a obras sociales. Para los más pequeños, hubo como en años anteriores atracciones hinchables que hacían las delicias de los mismos.
La misa comenzaba sobre las doce y media, oficiada por el Franciscano Fray Francisco Arias, con la participación musical a cargo del grupo Alborada, y con la asistencia de la Alcaldesa de la ciudad Elena Nevado, acompañada por el Edil Valentín Pacheco. Finalizada la Misa, se procedió en el interior de la Ermita a la Bendición de la Virgen de los Mártires tras la restauración a la que ha sido sometida y a continuación la Banda Municipal ofreció un amplio recital de música popular, pasodobles y música regional.
Este año como novedad se ha realizado la entrega de diplomas a las personas que han asistido con traje regional, viviéndose un gran ambiente romero en los alrededores y paseo donde cada año se va haciendo ya tradicional la aportación de comidas entre familiares y amigos, con una convivencia alargada hasta bien entrada la tarde.
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